martes, 15 de junio de 2010

Observación Participante

La observación participante se refiere a una práctica que consiste en vivir entre la gente que uno estudia, llegar a conocerlos, a conocer su lenguaje y sus formas de vida a través de una intrusa y continuada interacción con ellos en la vida diaria.
Para Sanmartín se trata de una técnica característica del trabajo de campo antropológico, que busca especialmente comprender la alteridad.
Se hace usando los órganos de los sentidos, ya que toda observación necesita de una estrategia cognitiva. Utilizamos los sentidos para realizar un proceso de categorización de lo que vemos.
La observación es una técnica de recopilación de datos ya que se rige por una búsqueda deliberada, llevada a cabo con cuidado y premeditación. Para Velasco y Rada se precisa de un sexto sentido que significa tener siempre la conciencia de que se está investigando.
Consiste en utilizar los sentidos para observar hechos y realidades sociales presentes y a las gentes en el contexto real en donde se desarrolla normalmente sus actividades.
Se hace para recopilar los datos que se consideran importantes en relación con el objeto de la investigación.
La observación debe ser intencionada. Se deben diversifcar los contextos de interacción, por lo tanto precisa de una identidad variable y diversa del investigador. Debe conducirse con una distancia entre el observador y lo observado y conjugarse con una proximidad que permita la participación en lo observado.
Esto significa que el etnógrafo conversa con la gente, trabaja con ellos, asiste a sus funciones sociales, visita su casa y les invita a la suya, es decir, estar presente en tantas situaciones como sea posible.
Vivir con ellos, recogiendo información, detectando las características particulares y ver las diferencias entre su mundo y el de los otros de manera que le permita comprender la alteridad.
El fin es aprender a conocer el objeto de estudio en tantos ambientes y facetas como pueda, con objeto de conocer sus puntos de vistas para aprender a usarlos, ya que como dice Velasco y Rada, se trata de lograr una socialización secundaria, que permita no-solo saber como actúan los otros sino poder actuar como si fueran ellos.
El investigador debe tener una disposición para tal fin, haber hecho una revisión escrita de la teoría, haber planteado el problema, formulando hipótesis y asumiendo roles diversos e incorporándonos a sus rutinas.
El observador no es un simple hacedor de un trabajo, sino que entra en juego en el contexto de la observación.